El ganador del Premio Nobel de Literatura austriaco, Peter Handke, defendió el miércoles su apoyo vocal a los serbios en las guerras de 1990 en la ex Yugoslavia, pero dijo que “nunca se inclinó” ante Slobodan Milosevic.
La elección de la academia sueca el mes pasado provocó indignación en los Balcanes y más allá debido a la admiración de Handke por el difunto hombre fuerte serbio.
Además de por sus obras literarias, Handke fue ampliamente criticado por hablar en el funeral de Milosevic en 2006, quien murió en espera de juicio por genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Peter Handke, vestido con traje y corbata, sonriendo y mirando a la cámara: “Supuestamente expresé simpatía por Milosevic. ¡Nunca!” el autor le dijo a Die Zeit © Alain JOCARD “Supuestamente expresé simpatía por Milosevic. ¡Nunca!” el autor le dijo a Die Zeit.
En declaraciones al semanario alemán Die Zeit, Handke dijo “por supuesto” que tenía que estar en el funeral de Milosevic en 2006.
“Votó en contra de disolver Yugoslavia en una de las últimas votaciones. Su funeral también fue el funeral de Yugoslavia”, dijo Handke. “¿La gente ha olvidado que este estado fue fundado en oposición al Reich de Hitler?”
Al mismo tiempo, Handke dijo que “ni una sola vez se inclinó ante él, ni internamente ni externamente”.
Un periodista escribió “que supuestamente expresé simpatía por Milosevic. ¡Nunca!” el autor le dijo a Die Zeit.
Foto: Alain JOCARD