Hamás liberó el lunes a dos mujeres israelíes que se encontraban entre los más de 200 rehenes tomados durante su ataque al sur de Israel el 7 de octubre.
En medio del conflicto armado, Hamás dijo que liberó a Yocheved Lifshitz, 85, y Nurit Cooper, 79, por razones “humanitarias” y de salud.
Yocheved Lifshitz es conocida como una activista por la paz que ayudó a los palestinos enfermos en Gaza a recibir tratamiento médico en Israel.
Según funcionarios israelíes, el marido de Cooper, Amiram, de 85 años, y el marido de Lifshitz, Oded, de 83, siguen detenidos por Hamás en Gaza.
Israel agradeció a Egipto por su ayuda en la mediación de la liberación de las dos mujeres israelíes y a la Cruz Roja por el “importante papel” que desempeñó para “traer a las dos a casa”.
El presidente estadounidense, Joe Biden, acogió con satisfacción su liberación y enfatizó la necesidad de una asistencia humanitaria continúa a Gaza.
En el actual conflicto entre Israel y Hamás, el número de muertos en Gaza ha superado las 5.000 personas en dos semanas de ataques aéreos israelíes.
El actual conflicto entre Israel y Hamas ha cobrado un precio devastador para el pueblo de Gaza, con miles de vidas perdidas y una multitud de civiles desplazados.
El número de palestinos muertos en el conflicto ha aumentado, y entre las víctimas hay miles de niños.
A medida que la violencia continúa aumentando, la comunidad internacional debe unirse para abordar la crisis humanitaria y trabajar por una paz duradera.
Examinemos los acontecimientos recientes en el conflicto y resaltaremos la necesidad urgente de ayuda humanitaria y esfuerzos diplomáticos.
Escalada de violencia:
Durante las últimas dos semanas, los ataques aéreos israelíes en respuesta al ataque de Hamas contra el sur de Israel han resultado en una pérdida significativa de vidas, superando las 5.000 víctimas.
El número de víctimas incluye más de 1.400 personas muertas durante el ataque de Hamás, que causó devastación y sufrimiento generalizados.
Estas cifras son alarmantes y exigen atención inmediata por parte de la comunidad mundial.
La Casa Blanca acusó a Irán de facilitar activamente los ataques con cohetes y drones por parte de grupos proxy respaldados por Irán contra bases militares estadounidenses en Irak y Siria.
El presidente Biden ha ordenado al Departamento de Defensa que esté preparado para responder adecuadamente a estas amenazas.
Estados Unidos cree que estos grupos cuentan con el apoyo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán y que Irán continúa apoyando a los grupos militantes de Hamás y Hezbolá.
Convocatoria de Asistencia Humanitaria:
Al reconocer la terrible situación en Gaza, el presidente estadounidense Joe Biden enfatizó la necesidad de un flujo continuo de ayuda humanitaria durante una conversación con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Las Naciones Unidas y las naciones árabes ya han pedido una “pausa humanitaria” en las hostilidades, con el objetivo de proporcionar ayuda esencial a los 2,3 millones de personas que padecen escasez de artículos de primera necesidad.
El Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, se hizo eco de este sentimiento durante una llamada con el Ministro de Relaciones Exteriores palestino, Riyad al-Maliki, y destacó la importancia de una conferencia de paz internacional autorizada y eficaz.
Es crucial que todas las partes involucradas den prioridad al bienestar de la población civil y a las negociaciones para asegurar la liberación de los rehenes restantes.
Diplomacia Internacional:
Los esfuerzos de diplomacia internacional han sido mixtos. En una reciente cumbre de paz en El Cairo, los líderes árabes condenaron el bombardeo israelí de Gaza, pero no se pudo acordar ninguna declaración conjunta debido a la ausencia de Israel y Estados Unidos.
Estados Unidos ha apoyado públicamente el derecho de Israel a defenderse, pero en privado ha pedido cautela.
Sin embargo, entre bastidores, Estados Unidos ha estado instando en privado a ser cautelosos a los funcionarios israelíes, enfatizando la importancia de las negociaciones y la liberación de rehenes.
El presidente Biden destacó la importancia de la liberación de rehenes y enfatizó que deberían celebrarse más debates una vez que se logre este objetivo.
El ex presidente estadounidense Barack Obama también intervino en la crisis y advirtió contra acciones que podrían provocar víctimas civiles.
Hizo un llamado a Israel para que limite el daño a civiles, expresando preocupación de que tales acciones puedan alienar a generaciones de palestinos, socavar el apoyo global y obstaculizar los esfuerzos de paz a largo plazo.
Obama advirtió que la estrategia militar de Israel podría resultar contraproducente si ignora el costo humanitario.
Instó a Israel a limitar las bajas civiles y criticó la decisión de cortar los alimentos, el agua y la electricidad a la población cautiva en Gaza.
Vale la pena señalar que la alineación de opiniones entre Obama y la administración actual sobre este tema sigue sin estar clara.
Los líderes europeos también pidieron una “pausa humanitaria” en las hostilidades para proporcionar ayuda a Gaza.
Conclusión:
La escalada del conflicto entre Israel y Hamás en Gaza exige atención internacional urgente. La importante pérdida de vidas, el desplazamiento de civiles y el empeoramiento de la crisis humanitaria requieren medidas inmediatas.
La comunidad internacional, incluidas grandes potencias como Estados Unidos, China y Rusia, debe unirse para brindar ayuda humanitaria y promover esfuerzos diplomáticos para una paz sostenible.
Es imperativo que todas las partes involucradas den prioridad a la seguridad y el bienestar de los civiles, trabajen para lograr la liberación de los rehenes y entablen un diálogo constructivo para poner fin a la violencia y el sufrimiento en Gaza.