Una segunda ola de gripe está afectando a los Estados Unidos, convirtiéndola en una de las temporadas más desagradables para los niños en una década.
El número de muertes infantiles y la tasa de hospitalización de los jóvenes son los más altos vistos en este momento en cualquier temporada desde el brote de gripe grave de 2009-10, dijeron el viernes funcionarios de salud. Y se espera que la ola continúe durante semanas.
Los expertos dicen que es potencialmente un mal momento para una temporada de gripe extendida, dadas las preocupaciones sobre el nuevo coronavirus fuera de China, que puede causar síntomas que pueden ser difíciles de distinguir de la gripe sin una prueba.
Si el coronavirus comenzara a propagarse en los EEUU, podría haber confusión sobre si las personas se enferman con él o la gripe, dijo el Dr. William Schaffner, experto en enfermedades infecciosas de la Universidad de Vanderbilt.
Esta temporada de gripe tuvo su inicio más temprano en 15 años, con aumentos repentinos de enfermedades similares a la gripe en algunas partes del sur desde octubre. La mayoría de los casos fueron causados por un tipo de gripe que generalmente causa infecciones sustanciales solo en la primavera, al final de la temporada de gripe.
Esa ola alcanzó su punto máximo a fines de diciembre y cayó de manera constante durante semanas después.
Pero una segunda oleada comenzó a fines de enero. La semana pasada se produjo otro aumento en el porcentaje de visitas al consultorio del médico que se debieron a enfermedades similares a la gripe, según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos.
Fuente: AP
Foto: (Jim Weber/Daily Memphian via AP, archivo)
