El 21 de octubre de 2021, una tragedia sacudió la industria cinematográfica. En el set de la película occidental “Rust”, se disparó una pistola de utilería que sostenía el actor Alec Baldwin, matando a la directora de fotografía Halyna Hutchins e hiriendo al director Joel Souza.
El evento, que tuvo lugar en Bonanza Creek Ranch en el condado de Santa Fe, Nuevo México, provocó un frenesí en los medios y reavivó las discusiones sobre la seguridad de las armas en los sets de filmación.
El incidente conmocionó a la industria del entretenimiento, estableciendo paralelismos con la muerte en 1993 de Brandon Lee, el hijo de Bruce Lee, quien fue herido mortalmente por una pistola de utilería durante el rodaje de “The Crow”.
Shannon Lee, la hermana de Brandon, expresó su dolor por las víctimas de “Rust” y pidió cambios en toda la industria.
“No hay razón para que algo como esto suceda”, afirmó, abogando por la prohibición de armas reales en los sets de filmación. “Creo que nos hubiera gustado haber pensado en hacer más hace 28 años, y nos encantaría hacerlo ahora”.
Tras el tiroteo, Baldwin expresó su conmoción y tristeza. “Estoy lleno de conmoción y tristeza por el trágico accidente que acabó con la vida de Halyna Hutchins, esposa, madre y colega nuestra profundamente admirada”, dijo.
“Estoy cooperando plenamente con la investigación policial para abordar cómo ocurrió esta tragedia”.
En enero de 2023, tanto Baldwin como la armera de “Rust” Hannah Gutiérrez-Reed fueron acusados de homicidio involuntario. Si bien Gutiérrez-Reed fue declarada culpable y sentenciada a 18 meses de prisión, Baldwin mantuvo su inocencia.
Sostuvo que creía que el arma estaba cargada con balas de fogueo y que no se le podía responsabilizar por la negligencia de quienes tenían la tarea de velar por la seguridad del set. Sin embargo, el caso dio un giro sorprendente el viernes.
Durante el juicio de Baldwin, que había comenzado el miércoles, su equipo de defensa reveló que los fiscales habían ocultado pruebas que podrían haber sido cruciales para el caso: un lote de municiones llevadas al oficina del sheriff en marzo por un amigo del padrastro de Gutiérrez-Reed, Troy Teske.
La defensa argumentó que el hecho de que la fiscalía no revelara estas pruebas fue un acto deliberado de mala conducta, un encubrimiento destinado a asegurar una condena.
La jueza Mary Marlowe Sommer, que presidió el juicio, estuvo de acuerdo con la defensa y consideró que las acciones del estado eran “ardientes” y “cercanas a la mala fe”.
Ella desestimó el caso con prejuicios, poniendo fin efectivamente a cualquier posibilidad de que Baldwin fuera procesado por la muerte de Hutchins.
La noticia del despido provocó lágrimas de alivio por parte de Baldwin y su familia.
Se vio a su esposa, Hilaria Baldwin, abrazándolo en la sala del tribunal. El despido supuso una importante victoria para el actor, pero sin duda el calvario ha dejado huella.
Si bien la desestimación del caso de Baldwin trajo una sensación de cierre, también trajo nuevas incertidumbres para los involucrados.
El abogado de Gutiérrez-Reed, Jason Bowles, anunció de inmediato que presentaría una moción para desestimar el caso de su cliente basándose en los mismos motivos de mala conducta fiscal.
Expresó su creencia de que la fiscalía había incurrido en un “patrón de violaciones del descubrimiento” y argumentó que esta mala conducta fue devastadora para Gutiérrez-Reed, quien permanece encarcelada.
El viudo de Halyna Hutchins, Matthew Hutchins, había resuelto previamente su demanda civil contra Baldwin y otros productores de “Rust”.
El acuerdo incluía que se convirtiera en productor ejecutivo de la película, que se reanudó el rodaje en Montana y se completó en 2023.
Sin embargo, la desestimación del caso penal de Baldwin podría tener repercusiones en el acuerdo, y el abogado de Hutchins, Brian Panish, indicó que están todavía buscando responsabilizar a Baldwin por la muerte de Hutchins.
Los trágicos acontecimientos del 21 de octubre de 2021 y las batallas legales posteriores han dejado un impacto duradero en Hollywood.
La desestimación del caso de Baldwin ha puesto de relieve la necesidad de protocolos de seguridad de armas más estrictos en los sets de filmación y ha generado preocupaciones sobre la idoneidad de las investigaciones legales y la posibilidad de mala conducta fiscal en casos de alto perfil.
Si bien la saga de “Rust” puede estar concluyendo, es probable que continúe el debate en torno a la seguridad en el set y la responsabilidad de quienes participan en las producciones cinematográficas.