Un fuerte terremoto de magnitud 6,9 azotó la isla de Mindanao, sur de Filipinas, el sábado, lo que provocó temores de olas de tsunamis en toda la región, pero después de aproximadamente dos horas, se retiró la alerta de tsunami.
No hubo informes de víctimas o daños causados por el terremoto, que el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) dijo que alcanzó 193 km (120 millas) al este de la ciudad filipina de General Santos, a una profundidad de 60 km (37 millas).
El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico inicialmente dijo que las “olas de tsunamis peligrosas” eran posibles a 300 km (186 millas) del epicentro, “a lo largo de las costas de Filipinas, Indonesia y la nación isleña del Pacífico de Palau.
Pero unas dos horas después del terremoto, el centro dijo que ya no había una amenaza de tsunami.
El USGS dijo inicialmente que la magnitud del terremoto era de 7.2, pero luego lo rebajó a 6.9.
Los residentes del sur de Filipinas dijeron que el terremoto duró aproximadamente un minuto y que la gente salió corriendo de los edificios, pero que no hubo daños mayores.
“Estaba en la recepción y vi que los candelabros se balanceaban”, dijo a Reuters por teléfono Jonna Ramos, quien trabaja en el Hotel Anchor en General Santos, y agregó que todos los invitados y el personal habían abandonado el edificio, pero luego volvieron a entrar.
Los medios de comunicación de Indonesia también dijeron que no hubo informes de daños.
Fuente: Reuters
Foto: Proporcionada por USGS
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